11 de noviembre de 2012

VIDA DE UNO



Uno no entiende las cosas
que se van sucediendo
a lo largo y ancho de los días.
Intenta uno descifrar
los jeroglíficos del aire,
saber del futuro por el vuelo de un pájaro,
ordenar el puzle sin fin
sin que el resultado sea la quimera.
En vano: el enorme rastrillo
alisa las historias.
Por eso uno reclama una voz que hiera el oído,
que lo haga emerger de los oscuros misterios
que nadie logra revelar
y poder embarcarse en la góndola del tiempo
navegando entre los peces muertos de toda desolación.
Pasan las nubes, pasa la vida a orillas del río
que uno en sueños cruza sin temor ni temblor,
bajo soles y estrellas
de una memoria que se precipita,
y, cuando uno despierta,
el viento silba lleno de asombro,
las veletas oxidadas chirrían
girando sin norte en el vacío de su espacio,
y uno
se da cuenta de que ha de volver sobre sus huellas
para ver
cómo el último sol anaranjado
se hunde con todas las cosas de uno
y con uno mismo.


Orlando Santana Cabrera

9 de septiembre de 2012

HISTORIA CLINICA


Informó que sufría de taquicardia cada vez que lo veía, aunque fuera de lejos.
Declaró que se le secaban las glándulas salivales cuando él la miraba, aunque fuera de refilón.
Admitió una hipersecreción de las glándulas sudoríparas cada vez que él le hablaba, aunque fuera para contestarle el saludo.
Reconoció que padecía graves desequilibrios en la presión sanguínea, cuando él la rozaba, aunque fuera por error.
Confesó que por él padecía mareos, que se le nublaba la visión, que se le aflojaban las rodillas. Que en los días no podía parar de decir bobadas y en las noches no conseguía dormir.
- Fue hace mucho tiempo, doctor -dijo-. Yo nunca más sentí nada de eso.
El médico arqueó las cejas:
- ¿Nunca más sintió nada de eso?
Y diagnosticó:
- Su caso es grave.


Eduardo Galeano

3 de septiembre de 2012

TAUTOGRAMA PRESTADO

Continúo caminando cabizbaja Conmovida, confundida, consolándome 
Consumiendo quejidos, cansancios 
Quizás, cuando comprenda calcinaré Congojas, cruces, condenas, castigo.

Contigo concluyeron caricias, 
Cálidas campiñas coloreadas, 
Contigo consumí cuerpo con cuerpo
Crisolados cielos cubiertos con cariño,
Coseché quimeras, cuentos, caminos

Contemplé cielos calmados,
Clareadas cristalinas, clamorosas 
Cuánto quería, cuánto codiciaba
Cuánto quisimos conquistar,
Quedó cortado cruelmente con cuchillos 

¿Cómo comprenderlo? ¿Cómo comenzar? ¿Conque?
¿Qué conjuro cobarde quiso qué Corazón quedara comprimido cercenado, consumido?

Contigo conversaba, compartía, Comprendía, colaboraba, 
Conquistaba, comenzaba
Consumía cariños crecidos
Cooperaba, COEXISTÍA

Contemplamos crespúsculos
Cubiertos con capuces, calmados
Combinamos carismas, caracteres

Quiero concluir con clamores, 
Con condenas carcomidas
Continuar con coraje, con cabeza clara
Cumpliré con creces contigo, conmigo.

¡Querido camarada! Camino contra Corrientes calladas, conformistas
Candentes, ¿cómo continuar?

¡Querido compañero! Confieso que Quise caer culminada contigo,
Conocerte compensó con creces
Cuantas cruces quieran cabalgar conmigo

¡Querido cómplice! conservaré 
Cada costumbre, cada contraseña,
Cada culto, cualquier cosa 
Que quisimos, que conseguimos
Convencida, con complacencia, 

Cuidaré con corazón conmovido
Cualquier cosa que construimos
Cada caricia que compartimos
Con convicción, con celo, con cariño 

¡Cuánto comprensión consolidada. 
Cuánto cariño consumado 
Cuánta compañía compartida
Cuántas caricias, cuántas confidencias
Cómo creábamos, conjugábamos! 

¡Cuántas cosa comenzamos, Concretamos, concluimos, 
Cuánto quisimos, cuanto consumimos.
Codo con codo combatimos Contrariedades, contratiempos, 

Creeré ciegamente qué,
Cuando cuerpo crápula casi cadáver Comparezca, culminara con cargas.
Correrá cuál contento con Cupido
Como caudal caudaloso, crecido 

Cruzara complacido, canturreando Cantinelas, que conseguirán calmar 
Con corazón compungido, corroído.


Vjaolsee Tatö

31 de agosto de 2012

MI MANERA DE ESTAR SOLO

Hagamos un trato

Cuando sientas tu herida sangrar
cuando sientas tu voz sollozar
cuenta conmigo.
(de una canción de Carlos Puebla)

Compañera,
usted sabe
que puede contar conmigo,
no hasta dos ni hasta diez
sino contar conmigo.

Si algunas veces
advierte
que la miro a los ojos,
y una veta de amor
reconoce en los míos,
no alerte sus fusiles
ni piense que deliro;
a pesar de la veta,
o tal vez porque existe,
usted puede contar
conmigo.

Si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo,
no piense que es flojera
igual puede contar conmigo.

Pero hagamos un trato:
yo quisiera contar con usted,
es tan lindo
saber que usted existe,
uno se siente vivo;
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos,
aunque sea hasta cinco.

No ya para que acuda
presurosa en mi auxilio,
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe que puede
contar conmigo.


Mario Benedetti

19 de julio de 2012

LAS GANAS DE ROMPER CON TODO



Las ganas de romper con todo
con la cotidaniedad de la vida
volverme una linea
un color
mover los dedos
disparar palabras
dejar la fuerza
que se esconde en el pliegue de mis pechos
rebote contra toda esta podredumbre
y perderme en el silencio
quedar como retrato desafiante
perder el nombre
el cuerpo
todo
volver de donde vine. 
Cristina Chiquin

28 de junio de 2012

QUÉ HACES AQUÍ, TRISTEZA?


Creía que te había dicho adiós,
un adiós contundente, al acostarme,
cuando pude por fin cerrar los ojos
y olvidarme de ti y de tus argucias,
de tu insistencia, de tu mala baba,
de tu capacidad para anularme.
Creía que te había dicho adiós
del todo y para siempre, y me despierto
y te encuentro de nuevo  junto a mí,
dentro de mí, abarcándome , a mi vera,
invadiéndome, ahogándome, delante
de mis ojos,  enfrente de mi vida,
debajo de mi sombra, en mis entrañas,
en cada pulso de mi sangre, entrando
por mi nariz  cuando respiro, viendo
por mis pupilas,  arrojando fuego
en las palabras que mi boca dice.
Y ahora, ¿qué hago yo?, ¿ cómo podría
desterrarte de mí o acostumbrarme
a convivir contigo? Empezaremos
por demostrar modales impecables.
Buenos días, tristeza.

22 de junio de 2012

TE VEO COMO UN TEMBLOR



Te veo como un temblor
en el agua
Te vas,
te venís, 
y dejas anillos en mi imaginación

GIOCONDA BELLI

11 de abril de 2012